lunes, 25 de noviembre de 2013

Si me opongo con fuerza a lo que no deseo, desaparecerá.



Jerry: Pero ¿no se sentirán abandonados si apartamos nuestra atención de su sufrimiento? 
¿No tenemos posibilidad alguna de anidar a los que lo necesitan?

Abraham: Aquí tienes una oportunidad para empezar a comprender una premisa incorrecta básica de vuestra sociedad:


Premisa incorrecta nº 3: 


Si me opongo con fuerza a lo que no deseo, desaparecerá.


Vivís en un Universo que se basa en la Ley de la Atracción.
Eso significa que se basa en la inclusión, no en la exclusión.
Es decir, en un Universo basado en la inclusión, en la atracción, no existe el «no».
Cuando miras algo que deseas y le dices «sí», lo estás incluyendo en tu Vibración; entonces se convierte en una parte de las Vibraciones que emites, lo que implica que pasa a formar parte de tu punto de atracción, lo que significa que empieza a dirigirse hacia ti.
Pero cuando le dices «no», también lo estás incluyendo en tu Vibración, y se convierte en parte de las vibraciones que emites, lo que a su vez implica que pasa a formar parte de tu punto de atracción, lo que significa que empieza a dirigirse hacia ti.
No eres de utilidad alguna para nadie que reciba tu atención negativa.
Cuando observas algo en otra persona que te hace sentir mal, tu emoción negativa es el indicador de que estás potenciando algo no deseado.
En las primeras fases de la emoción negativa, apenas te das cuentas, pero si sigues concentrándote en las cosas que no deseas, éstas empiezan a presentarse en tu vida de formas cada vez más notables.

El Vórtice.
La ley de la atracción en nuestras relaciones.
Abraham.

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